Hay un momento en el que la vida se renueva, que lo seco reverdese y que los colores más brillantes surgen.
Me puse a dibujar con acuarelas y estas son las flores de la temporada.
Hay un momento en el que la vida se renueva, que lo seco reverdese y que los colores más brillantes surgen.
Me puse a dibujar con acuarelas y estas son las flores de la temporada.
Siempre nos dicen que cuando la vida te da limones, hagas limonada. Pero que ocurre cuando alguien te dice que tiene los limones para que la hagas y sin importar que ya tenias el agua y el azúcar para prepararla decide no dártelos porque no le dejaron cortarlos del árbol. Creo que muchos tendemos a enfadarnos, a enojarnos y tal vez a gritar porque no es posible que nos dejen en espera de ello. Algunos pensaran, pues consíguelos de otra manera, cómpralos pero no dejes de hacer la limonada. Podría haber sido buena solución, pero en situaciones así, yo considero que es mejor olvidarse de la limonada, olvidarse del ofrecimiento de los limones y lo más practico es buscar una alternativa diferente. Yo deje atrás la limonada y me concentre en preparar una naranjada, olvidándome de todo y disfrutando ahora de una buena naranjada.